Todos nos lo hemos preguntado en algún momento cuando es el momento de cambiar de Smartphone, especialmente cuando el presupuesto que tenemos no está para ir cambiando de Smartphone con frecuencia o si estamos relativamente contentos con el funcionamiento de nuestro teléfono actual, nos aferramos como a un clavo ardiendo.
Puedes escuchar el podcast de la emisión en Radio Rioja Cadena SER
El propio Smartphone da avisos de que está llegando el tiempo de renovarlo, sin caer en la obsolescencia programada que comentamos hace tiempo. Quizá estos indicativos nos ayuden a reconocer que toca cambiarlo.
1. No queda espacio con frecuencia
Una de las grandes maldiciones de Android es que no importa cuánto espacio de almacenamiento disponible tengamos en el teléfono, antes o después se va a quedar corto. Y comenzamos con una pelea diaria por lograr actualizar las apps, ganando espacio de donde queda ya poco.
Aunque podamos realizar técnicas para liberar espacio en el Smartphone como, borrar la memoria caché, limpiar el historial de descargas, eliminar fotos, vídeos, música y otros archivos que no sabemos ni para que los conservamos, o revisar que apps realmente utilizamos y desechar las demás. A la larga es una batalla que difícilmente vamos a ganar. Con un aprovechamiento escaso de las tarjetas de memoria SD y con aplicaciones cada vez más pesadas, un móvil con el almacenamiento justo casi nos proporciona más frustraciones que alegrías.
2. La batería dura un suspiro
Cualquier batería tiene una vida útil determinada, y es que su capacidad de carga va disminuyendo con el uso. Si seguimos todas las recomendaciones para mantener la integridad de la batería como; no cargar la batería desde el ordenador siempre es mejor el enchufe de parecer no usar el Smartphone durante la carga, no esperar a que se descargue por completo, o usar el cargador especifico. Lograremos alargar su uso pero inevitablemente el tiempo pasa para todo y seguirá durando menos que recién comprado.
Aquí debemos andarnos con ojo pues entran más factores además del propio desgaste de la batería, el propio Android es el que se va volviendo más lento y pesado con el tiempo. Si quieres comprobar de verdad que la batería está hecha polvo, la mejor forma es restaurar el terminal de fábrica. Pero esto no es lo más recomendable para todas las personas.
Por supuesto, podemos comprar una nueva batería, dando nueva vida al Smartphone, aunque para llegar al punto en el que la batería del móvil esté inservible seguramente el móvil en general sea ya algo viejo, a no ser que se haya maltratado bastante a la batería, dejándola al sol o mojándose o llenándose de polvo. Entonces debemos pensar si merece la pena invertir dinero en el teléfono o comprar otro nuevo.
3. La versión de Android cumple muchos años
Otro problema desgraciadamente común es que el fabricante del dispositivo se niegue a lanzar actualizaciones, dejándolo anclado en una versión de Android desfasada. Se podría decir que, de media, los fabricantes actualizan a una versión mayor en toda la vida útil del Smartphone por suerte, hay excepciones. Android lanza una nueva versión religiosamente cada año.
No hay ningún problema en usar una versión algo antigua de Android, aunque es inevitable que antes o después empecemos a tener avisos de las aplicaciones que tenemos el en móvil de que a perdido compatibilidad con las últimas actualizaciones y ya no permite la aplicación se actualice. Si es el caso y tienes los conocimientos necesarios puedes darle nueva vida a un terminal que se está quedando viejo instalando a mano una ROM. Pero francamente es una posibilidad que recomiendo lo justo.
4. Hay que esperar al Smartphone
Seguramente no necesitemos el procesador más potente del mercado para usar el WhatsApp, pero eso no quiere decir que algunos componentes se estén empezando a quedar algo oxidados para el uso en el día a día, con aplicaciones pesadas, ventanas en segundo plano o páginas web que ponen al procesador al límite.
Si nos encuéntranos con frecuencia esperando a que el móvil termine de pensar para hacer una acción, y no le estamos forzando a hacer nada fuera de lo común como cargar un nuevo juego con los últimos gráficos, quizá vaya siendo el momento de que pensar en comprar uno nuevo. De igual manera si por arte de magia se empieza a reiniciar solo sin motivo aparente.
No es cuestión de comprarte el último tope gama para que todo vaya fluido, un gama media actual es muy recomendable para casi todos los tipos de usuarios, ya que esta categoría de móviles son más eficaces que los de la misma categoría hace unos años.
5. No tiene lector de huellas
Hace unos años los lectores de huellas no eran demasiado populares ni casi utiles, pero desde que todos los fabricantes del mundo están empeñados en sacar su propio sistema de pagos con el móvil, ya que por aquí va el futuro de la tecnología, se están convirtiendo en un accesorio imprescindible por seguridad. Probablemente no necesitemos el lector de huellas hoy en día, pero de cara al futuro es algo a tener en cuenta.
Al igual que otros sistemas de seguridad que incluyen los fabricantes de Smartphone, van encaminados para tener el móvil, cada vez más protegido.
Y una recomendación importante, no olvidemos, el ponerle cualquier medida para desbloquearlos, la que más nos guste o como nos resulte más cómodo, pero ponerle una. No tengamos el dispositivo sin ningún tipo de patrón de desbloqueo, porque básicamente estaremos regalando el Smartphone al más habilidoso del entorno. Pero puede parecer obvio pero estoy seguro de que si hacemos memoria se nos acurren una lista de personas que tienen el móvil sin patrones de desbloqueo de ni ningún tipo de medida de seguridad.
6. La cámara no es demasiado buena
Hoy en día hasta el móvil más accesible cuenta con una cámara decente, mientras que las fotos del Smartphone al que nos aferramos desde hace unos años podrían ser algo más duras de ver. Por tener arañada la lente, o la aplicación de la cámara esta desactualizada, consiguiendo fotos más borrosas de lo que te gustaría.
Teniendo en cuenta que estamos pasando de la comunicación mediante texto a incluir cada vez más imágenes, y que cada vez hay más personas que dejan la cámara en casa y usamos la de Smartphone como una solución todo en uno, la calidad de la cámara es algo a tener en cuenta.
7. No nos importa que se rompa
Lo último a comentar de los avisos de que es hora de cambiar el Smartphone, es un indicio que no depende del móvil, sino de nosotros. Si da cosa cambiar de teléfono a no ser que no tengas más remedio, probablemente ya estemos empezando a importarnos cada vez menos los golpes en el viejo Smartphone aunque sigue tan útil como el primer día.
Si gustaría comprarse uno de los nuevos modelos pero ya tienes el teléfono, y funciona. Aunque algo anticuado, tiene una versión de Android de hace años y le cuesta mover aplicaciones pero funciona. En este caso podemos mantenernos fiel al viejo Smartphone, y no desecharlo por completo al comprar uno nuevo. Podemos reciclar un móvil viejo para otros usos. Usar el viejo móvil como reproductor multimedia o como despertador, etc…
Interesantes tips. Muy pragmático. Ahora cambiamos mucho menos de móvil que al inicio del boom, pero llega el momento en el que toca cambiar. Seguro que vuestro artículo es útil para mucha gente.
Os descubrí gracias a este post. Os seguiré la pista (o el feed ;-).
Saludos!
Nos alegra que te resulte interesante el post!! puedes seguir navegando por la web para conocer mas contenido y esperamos que las próximas publicaciones te sigan resultando al menos igual de interesantes.
Saludos!